Cuando el Pisuerga pasa por Valladolid

(El Pisuerga pasando por Valladolid)

Ya se sabe que cuando el Pisuerga pasa por Valladolid siempre aparece algún listillo para aprovechar las circunstancias. En este caso el Pisuerga es la prescripción de enfermería. Si a esto le sumamos el axioma moderno de "Hay que dar legalidad a lo que ya está ocurriendo", que así en bruto sirve para un roto y para un descosido, pasa lo que pasa y es que aparece Dª Carmen Peña (a este paso vamos a añorar al Capilla ga-gá de los últimos años) y lanza la propuesta:

No pedimos prescribir, sino dispensar sin incurrir en ilegalidades

Traducido a román paladino, como lo que se está haciendo, a pesar de ser ilegal, es dar , adelantar, y prescribir para síntomas menores (y a veces no tan menores), pues lo dotamos de legalidad en un pequeño parrafo que liste una larga serie de excepciones a la legalidad y así el médico de familia se tiene que comer con patatas (esta vez de forma legal) lo que el señor farmacéutico ha dado, adelantado o recetado en TU NOMBRE, porque al final, la receta llevará tu nombre.

A este paso como lo que está ocurriendo es que te roben en el coche, vamos a dar legalidad al hecho y a facilitarlo, prohibiendo que se dejen los vehñiculos cerrados, con lo que se facilitará la labor de los cacos y se minimizarán los daños en los vehículos.

!Qué país!

PD: Por cierto, que la receta eléctrónica deja sin sentido el 90% de las excepciones esgrimidas en el famoso párrafo al que me he referido. Queda una bien clara, los antibióticos en caso de "urgencia" o para "completar un tratamiento". Tanto recorrido para volver a una decada del pasado