Toda la plana mayor de la Consejería ha comparecido para apuntar algunas conclusiones sobre lo actuado en torno a la Gripe A. Cada uno cumple con su papel pero me imagino que cuando se reunen en privado se habrán planteado las mismas cuestiones pero manejando otros escenarios y otras respuestas que no pueden lanzar en público.Para empezar, sólo el 9,3% del personal sanitario se ha vacunado. Es decir que el 90,7% no les ha creido en sus mensajes. Lo fácil es decir que se deba a las campañas de internet, que si los blogs, que si las teorías conspirativas judeomasónicas ... pero resulta que el personal sanitario no es precisamente un personal que, en el tema que nos ocupa, sea "analfabeto" ni "tonto del haba". Resulta que tienen criterio y que además han estado viviendo la realidad día a día. Y ese ha sido su gran fallo: NO HABER MODULADO LOS MENSAJES EN FUNCIÓN DE LA EVOLUCIÓN DE LOS ACONTECIMIENTOS o como bien dicen en su comparecencias "Ahora bien, la lección aprendida en este sentido es la necesidad de ajustar la información al nivel de incidencia de la epidemia, de forma que no se produzcan desajustes entre los mensajes que se envían a la población y lo que los ciudadanos viven en su entorno".
Y como bien reconoce Bengoa "la población cree más a los médicos que a la Administración". Así que la próxima vez hay que tener claro que sin ellos no hay campaña posible y menos contra ellos y que para que se sumen al carro hay que evitar frasecitas como "los médicos no han dado ejemplo". Convencer que no vencer. Los médicos han hecho lo que creían que tenían que hacer para su bien y el de sus pacientes, diga la OMS lo que diga y diga Bengoa misa en latín
La realidad es que han funcionado a piñón fijo y con un piñón del 17 cuando la realidad pedaleaba con uno de 42 (Txirrindulari dixit)
Del tema económico ni hablamos que me enciendo.
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